Decálogo

  • Desde el año 1392 en el que S.M. Juan I de Aragón, mediante Real Cédula crea esta Orden, velamos por la dignidad y la salvaguarda de la Señal Real, (Bandera del Rey Jaime I) Garantizando con entrega, Sacrificio y Honestidad, mediante los Caballeros y Damas de San Cristóbal,  el respeto a los símbolos nacionales, y la obediencia y servicio a la Casa Real.
  • Esta Real Orden fue constituida, sin ánimo de lucro, con los únicos fines de fomentar el servicio y reconocer la labor que a diario realizan las FFCCSS, Ejércitos, Voluntariado y Civiles por el servicio a la ciudadanía que así lo reclame y/o necesite
  • Fomentamos la vocación por y para servir a los demás, entre los miembros de las Instituciones, que tienen como misión servir, de ahí nuestro lema: “Semper Serviens” (Sirviendo Siempre).
  • Desde esta Real Orden se recompensará esa filosofía de vocación, proponiendo a aquellas personas, miembros o no de la Orden, para ser condecorados con la Cruz, Encomienda, Corbatín o Gran Cruz de Caballero de San Cristóbal, previa tramitación del expediente correspondiente, a aquellas personas e instituciones que hayan desarrollado una labor de servicio continuada o realizado un servicio extraordinario o heroico digno de ser reconocido.
  • Desde esta Real Orden se defenderá, el modelo constitucional del Reino de España, guardando y haciendo guardar la Constitución como norma fundamental del Estado, y el Ordenamiento jurídico.
  • Al ingresar en esta Real Orden, se jura o promete  Servir al Prójimo y Defender los Símbolos y Leyes del Estado, con Lealtad al Rey.
  • El recuerdo a los caídos, mutilados o heridos en acto de servicio y Caballeros/Damas de San Cristóbal, es continuo y su memoria será siempre ejemplo a seguir por los integrantes y futuros miembros de la Real Orden.
  • Concebimos a las FFCCSS y a los Ejércitos como parte importante y activa de la población, es por lo que desde esta Real Orden, se pretenden normalizar y acercar a la población civil la relación con las Instituciones Armadas, y de servicios público y  sus componentes que velan por su seguridad y bienestar.
  • Desde esta Real Orden se tienen como Patrones y Custodios de la misma a San Cristóbal y a la Virgen del Pilar. Venerando además a las Patronas y Patrones de los cuerpos civiles y militares de servicios.
  • Esta Real Orden mantiene sus tradiciones, estando presentes en oficios, procesiones o celebraciones religiosas señaladas. No obstante lo anterior, se entiende y respeta la aconfesionalidad de los miembros de la Orden que siguen el ideario del servicio a los demás, y todos los puntos reflejados anteriormente. Recordando que en su creación S.M. el Rey dispuso que se creaba con la condición de que pudiesen pertenecer a la misma, todos cuantos valiesen para servir, pues Sirve quien Vale.